Aprovechando una promoción de Yoigo en España, que ofrecía una tarifa plana de internet de prepago por 8 euros, adquirí este terminal con muchas ganas de hincarle el diente de lleno al mundo Android.
Y no me defraudó. Veamos las características de este terminal de 90€:
- Display: 480 x 800 pixels
- RAM: 512 MB
- ROM: 512 MB
- Versión de Android: v2.1 (Eclair)
- CPU: procesador ARM 11 @ 600 MHz (overclockeable)
- GPU: Adreno 200
Nada que envidiar a otros terminales de mayor gama. Y es que... merece la pena gastarse cantidades astronómicas por un terminal que puede rendir a un nivel parecido a este Blade?
Veamos un HTC Desire HD:
- Display: 480 x 800 pixels
- RAM: 768 MB
- ROM: 1.5 GB
- Versión de Android: v2.2 (Froyo)
- CPU: procesador Scorpion @ 1 GHz
- GPU: Adreno 205
Fijaros en la principal diferencia en CPU, GPU y la memoria ROM de almacenamiento interno pero... es suficiente para justificar las diferencias tan exageradas en el precio? Puede plasmarse en una ligera suavidad en el desplazamiento de los menús, en la gestión de las aplicaciones pero... nada más.
Personalmente, hubo una ventana de demanda por teléfonos potentes, como sucedió con los PC y al fiebre de los Gigas. Pero poco a poco va cayendo porque hay algunos factores inevitables que nos ponen los pies en la tierra, como por ejemplo: una batería que en ocasiones no pasa de las 12 horas?
Vosotr@s, qué pensais? Preferís un teléfono barato modificable 100% o un terminal caro con mucha fachada pero poco carisma???
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